
La última temporada de El juego del calamar ha resultado ser un motor clave para los resultados financieros de Netflix durante el segundo trimestre de 2025. La serie surcoreana, fenómeno global desde su estreno, volvió a romper récords al alcanzar 122 millones de visualizaciones, consolidándose como el contenido no angloparlante más exitoso en la historia de la plataforma.
El estreno de esta temporada, ocurrido pocos días antes del cierre trimestral en junio, no solo captó la atención de una enorme audiencia, sino que también elevó las expectativas financieras de la compañía. Netflix reportó ingresos totales de 11.080 millones de dólares entre abril y junio, superando ligeramente las previsiones del mercado. El beneficio neto alcanzó los 3.100 millones, y la ganancia por acción se situó en 7,19 dólares, por encima de los 7,08 estimados por analistas de LSEG.
Gracias a este desempeño, la empresa ajustó al alza su previsión de ingresos para 2025, proyectando entre 44.800 y 45.200 millones de dólares, un incremento respecto al pronóstico anterior. Este ajuste responde tanto al crecimiento de la base de suscriptores como al aumento en los ingresos publicitarios, factores que se vieron fortalecidos por el impacto de producciones como El juego del calamar.
Sin embargo, a pesar de estos sólidos resultados, las acciones de Netflix cayeron un 1,8% en operaciones posteriores al cierre bursátil, tras haber acumulado un alza del 44% en lo que va del año.
Además de El juego del calamar, Netflix lanzó en este trimestre otras producciones destacadas como Sirens, The Four Seasons y la tercera temporada de Ginny & Georgia, reafirmando su estrategia de diversificar su catálogo y atraer a audiencias de todo el mundo.
La plataforma ya anticipa que lo que resta del año será igualmente fuerte en cuanto a contenido, con el estreno de nuevas temporadas de dos de sus mayores éxitos: Wednesday y Stranger Things, series que han demostrado tener un poder significativo para retener suscriptores y generar impacto cultural global.