
Tras el sismo percibido ayer en El Salvador, las piscinas de Galeano, en Santa Ana Oeste, presentaron un cambio inusual en el color de sus aguas, tornándose de un tono turquesa intenso.
Este fenómeno ha llamado la atención de pobladores y autoridades, ante esta situación, el Área de Salud Ambiental de la Alcaldía de Santa Ana Oeste inició estudios preventivos para descartar cualquier posible riesgo.
El alcalde de Santa Ana Oeste, Jorge Castro, aseguró que se encuentran coordinando con la Autoridad Salvadoreña del Agua (ASA), para que realice los estudios pertinentes y evaluar si el contacto con el agua representa algún riesgo para la salud de los visitantes.
Mientras tanto, como medida preventiva, las autoridades locales decidieron cerrar temporalmente el balneario. Pobladores expresaron que es la primera vez que ven las aguas del balneario de color turquesa y aunque estaba prohibido el ingreso para bañarse, muchos acudieron para observar el fenómeno.

Cabe destacar que el nacimiento de esta agua es utilizado por comunidades cercanas para consumo humano, riego de cultivos y el ganado, como medida de precaución, las piscinas permanecerán cerradas temporalmente y no está permitido bañarse en ellas hasta que se tengan resultados concluyentes sobre la calidad del agua.
No obstante, las autoridades han informado que las personas pueden acercarse a observar este fenómeno natural, siempre bajo supervisión y respetando las indicaciones de seguridad.
El Ministerio de Medio Ambiente, descartó este miércoles que la actividad sísmica que se ha registrado en el occidente de El Salvador haya provocado el cambio de coloración observado en las aguas del balneario Galeano.
En una conferencia de prensa, el ministro del ramo, Fernando López, respondió a consultas sobre reportes de aguas turbias. “Eso no tiene nada que ver con los sismos”, aseguró el funcionario.
Según López, el fenómeno puede explicarse por el levantamiento de sedimentos en el agua debido al movimiento, pero “no hay conexión con ningún fenómeno en el subsuelo, con ningún fenómeno geológico o sísmico”.
El MARN no ha iniciado una investigación específica sobre estos cambios, al no representar un riesgo ni una señal de alerta, dijo. Sin embargo, López reiteró que mantiene un monitoreo constante del comportamiento sísmico y volcánico en todo el territorio nacional.
