José Roberto Amaya Zelaya, un expolicía salvadoreño, fue sentenciado a 25 años de prisión por extorsión agravada, hurto y limitación ilegal a la libertad de circulación.

La Fiscalía General de la República (FGR) informó sobre la condena de José Roberto Amaya Zelaya, un expolicía que abusó de su cargo para extorsionar a ciudadanos salvadoreños. Según las investigaciones, Amaya exigía diferentes cantidades de dinero a las víctimas, amenazándolas con capturarlas en flagrancia y acusarlas de pertenecer a agrupaciones ilícitas si no cumplían con sus demandas.
Entre las acciones intimidatorias de Amaya, se encuentra el decomiso de los teléfonos celulares de las víctimas, los cuales nunca fueron devueltos. Además, el temor generado por sus amenazas llevó a algunos afectados a abandonar sus viviendas, lo que agravó su situación.
La Fiscalía General de la República (FGR) reveló que el condenado utilizó su posición de autoridad para intimidar a sus víctimas y exigirles dinero bajo amenazas de acusaciones falsas.
El tribunal que llevó el caso lo declaró culpable de los delitos de extorsión agravada, hurto y limitación ilegal a la libertad de circulación, imponiéndole una pena de 25 años de cárcel. La sentencia fue celebrada como un paso importante en la lucha contra el abuso de poder y la corrupción en El Salvador.