
La embajadora de El Salvador en Estados Unidos, Milena Mayorga, aseguró este martes que Estados Unidos “es la nación más poderosa del mundo y es el que más ha logrado comprender la nueva era que vive El Salvador”. Su declaración fue compartida en su cuenta oficial de X (antes Twitter), en respuesta al respaldo emitido por Washington a las recientes reformas constitucionales aprobadas en el país.
El Departamento de Estado, a través de un portavoz citado por la agencia EFE, afirmó que la Asamblea Legislativa salvadoreña fue elegida democráticamente y tiene la facultad de modificar la Constitución conforme a sus procesos internos. “Rechazamos la comparación del proceso legislativo de El Salvador, basado en la democracia y constitucionalmente sólido, con regímenes dictatoriales ilegítimos en otras partes de nuestra región”, indicó el funcionario.
La reforma constitucional fue ratificada el pasado viernes y contempla tres cambios clave: la reelección presidencial indefinida, la ampliación del período presidencial de cinco a seis años y la eliminación de la segunda vuelta electoral. Esto permitiría que el actual presidente Nayib Bukele, quien goza de un amplio respaldo popular, pueda postularse para un tercer mandato consecutivo, aunque aún no ha anunciado formalmente su decisión.
Algunos organismos internacionales, como Amnistía Internacional y Human Rights Watch, han expresado preocupaciones sobre la reforma, señalando posibles impactos sobre el equilibrio democrático. Sin embargo, el Presidente Bukele ha argumentado que la reelección indefinida es una figura permitida en varias democracias consolidadas, como el Reino Unido, España y Dinamarca.
La postura de Estados Unidos ha sido interpretada por sectores oficialistas como un reconocimiento a la legitimidad del proceso salvadoreño, mientras continúa el debate nacional e internacional en torno a los alcances de las reformas.