Rusia responde con represalias por la Operación Teleraña.

Se reportan al menos 6 muertos y una veintena de heridos en Ucrania deja la segunda jornada del contraataque ruso.

Al menos seis personas fallecidas y una veintena de heridos. Este fue el saldo de la segunda jornada de la represalia rusa contra Ucrania por la Operación Telaraña, el inédito ataque con el que las fuerzas de Kiev destruyeron parte de la flota de bombarderos estratégicos del Kremlin.

El grueso de los ataques rusos se concentraron en contra la ciudad de Járkov, la segunda más poblada de Ucrania, la cual sufrió «el mayor» ataque desde el inicio de la invasión rusa en febrero de 2022, según su alcalde Igor Terehkov.

Durante la madrugada de este sábado nueve misiles y 206 drones fueron lanzados por la aviación y el ejército ruso, de acuerdo con las autoridades militares de Kiev, las cuales aseguraron haber derribado más del 80% de los vehículos no tripulados.

Reportan un saldo de 18 edificios de apartementos y unas 13 casas con daños en el centro de la ciudad, la cual está a menos de 50 kilómetros de la frontera rusa y que al inicio de la invasión cayó en manos de las fuerzas de Moscú.

Rusia ha sido acusada en reiteradas ocasiones por Ucrania de dirigir sus ataques hacia zonas civiles, algo prohibido por el derecho internacional humanitario y el IV Convenio de Ginebra relativo a la protección debida a las personas civiles en tiempos de guerra.

Pero Rusia no fue la única que lanzó ataques en la noche del viernes y madrugada de este sábado, Ucrania también disparó drones contra el territorio vecino.

Decenas de vehículos no tripulados, cargados con explosivos, cayeron en la provincia de Belgorod, fronteriza con la ucraniana Járkov, dejando al menos tres heridos, reportó su gobernador, Vyacheslav Gladkov.

La represalia rusa en contra de Ucrania comenzó entre la noche del jueves y la mañana del viernes, cuando Moscú lanzó sobre su vecino 407 drones, 38 misiles de crucero y seis balísticos, dejando tres muertos y 50 heridos.

Estos ataques son la respuesta a la audaz operación militar que Kiev (Ukranie) desarrolló el pasado 1 de junio y en la que bombardeó al menos cuatro bases militares rusas, algunas de ellas ubicadas en zonas tan aisladas como las cercanías del Ártico y Siberia y en las que destruyó parte de la flota de aviones que pueden lanzar las armas nucleares del país.

Comparte este post: